La llegada de un bebé requiere de una larga lista de preparativos y, a su vez, una larga lista de preguntas… Hoy resolveremos una de ellas: cómo lavar y planchar la ropa del bebé.
Hay que preparar el ajuar del bebé: la primera puesta, la canastilla, las sábanas del moisés, las toallas, etc. Lo habitual es que nos regalen gran cantidad de ropita para los primeros meses, aunque esta ropa sea nueva, es imprescindible que la laves previamente. La piel del recién nacido es muy sensible, por lo que es muy aconsejable lavar absolutamente todo el ajuar. El apresto con el viene y la manipulación hasta llegar al hogar puede provocar alergias al recién nacido, además de contener muchos microbios.
Aconsejamos que durante el séptimo mes de embarazo, empieces a lavar todo el ajuar del bebé que está por llegar. A esta altura del embarazo, todavía te sientes con bastante energía y es un buen momento para empezar a tenerlo todo preparado, por si el bebé viene con prisas y adelanta su llegada.
El lavado de la ropa del bebé, no requiere de mayor complicación que el lavado de nuestra propia ropa. Simplemente, sigue las instruccciones de la etiqueta para no estropear las prendas más delicadas. Puedes lavar la ropa a mano o a máquina. No hay problema en centrifugarla. Puedes utilizar la secadora o secarla al sol. Lo que sí que es imprescindible es que laves la ropa del bebé separada de la ropa de los adultos durante los primeros 6 u 8 meses.
Los bebés se manchan mucho y las manchas suelen ser difíciles de sacar. Antes de meter las prendas en la lavadora, hay que quitarles las manchas. Lo mejor es dejarlas en remojo con agua agua tibia o caliente con un poco de jabón, frotarlas, dejar unos minutos más en remojo y meter en la lavadora. Lo ideal sería eliminar las manchas de la ropa en cuanto se hayan producido, así evitaremos que se fijen.
Es importantísimo que utilices un jabón específico para ropa delicada, incluso encontrarás jabón neutro específico para bebés (Norit y Mercadona ofrecen muy buenas opciones). Son detergentes suaves normalmente incoloros y sin perfume. No deben contener ácidos ni componentes que puedan causar alergias o irritaciones en la piel del bebé, y tampoco es conveniente que utilices blanqueadores, quitamanchas, suavizantes o lejías. Enjuaga muy bien para eliminar todo rastro de jabón. Si es necesario, hacer un doble aclarado.
A muchos les puede sorprender que no se aconseje el uso de suavizantes en las coladas de la ropa del bebé. El motivo es que la aplicación de suavizantes en la colada para mantenerla suave, generalmente se hace después del aclarado de la prenda, con lo cual quedan sustancias químicas adheridas al tejido. Esos restos pueden irritar la piel del bebé.
Para planchar la ropa de los bebés, es importante verificar que la plancha esté limpia. Para ello calienta la plancha y pasa un paño ligeramente humedecido para eliminar los residuos de la superficie. Hay planchas que incluyen la función de autolimpieza.
Lee muy bien las indicaciones de la etiqueta de la prenda. Ajusta la temperatura de la plancha de acuerdo a esas instrucciones. Te puede ayudar clasificar la ropa en grupos según el modo de plancharla. Primero plancha la ropa que necesite menos temperatura, y posteriormente la ropa que requiera mayor temperatura. Si una mancha no se ha eliminado con el lavado, no debes plancharla pues se fijaría aun más con el calor.
La ropa de los niños suele tener impresiones de goma o plástico, bordados u otras aplicaciones. Para planchar estas partes, hazlo por el revés para que se pegue la plancha o extiende un paño fino por encima y baja la temperatura.
Como ves, no resulta mucho más complicado que el cuidado de tu propia ropa. únicamente hemos de tener un poquito má de cuidado.
Y en cuanto tengas todo listo, ya sólo queda esperar